AUTOEFICACIA ESTIMADA Y COMPORTAMIENTO III
AUTOEFICACIA ESTIMADA Y COMPORTAMIENTO III
![]() |
OBJETIVOS Y CONDUCTA |
La autoeficacia y el control sobre los resultados
Durante
el aprendizaje de los niños y adolescentes, los resultados que
esperan alcanzar con lo que hacen y la seguridad que tienen de que su
comportamiento servirá para alcanzar el objetivo, depende en buena
medida de la evaluación
que hagan de su autoeficacia
y, desde luego, de la
habilidad real para hacerlo.
Los
que ese otorgan altas puntuaciones en su autoeficacia seguirán
intentándolo sin que la desesperación los invada.
Cuando
cunde el desaliento y la desesperanza
"Cuando
en su experiencia personal acaban con la expectativa de que no pueden
influir en los resultados que les ocurren, y que los esfuerzos
realizados de nada sirven ni para obtener los objetivos, las
recompensas o evitar un castigo, pueden llegar a sentir indefensión,
impotencia, desánimo, desesperanza, resignación, e incluso
depresión, aunque también rabia y resentimiento (Seligman, 1975).
El impacto en los
sentimientos depende de las razones
a las que se atribuya la falta de control de los resultados.
Si la falta de control se atribuye a deficiencias personales, que
además son duraderas y están generalizadas, es más probable que se
experimente depresión; al contrario si se considera la falta de
control a factores externos, ocurre de vez en cuando y sólo en una o
dos tareas.
Los
sentimientos también
dependen de los criterios
con que se evalúan los resultados alcanzados y del valor
que se les concede a éstos. Es la evaluación de impotencia para
controlar los resultados que se consideran valiosos en la vida, y la
idea de que nada se puede hacer para conseguir resultados
gratificantes, lo que puede conducir a los niños, adolescentes y
jóvenes al desánimo y desesperanza.
Resistir ante la adversidad con esperanza
El
afrontamiento y control efectivo de los diferentes acontecimientos vitales
estresantes a través de la propia acción, contribuyen a producir en
los niños y adolescentes resistencia a la
adversidad y
sentimientos de esperanza.
Por
el contrario, la falta
de control sobre los resultados y la evaluación de una falta de
sincronía entre las propias acciones y la respuesta del
entorno, son
factores de vulnerabilidad para
la delincuencia en niños y jóvenes que están en situaciones de
riesgo y un factor de desesperanza aprendida (Werner, 1987).
Carlson
Neil, en su libro sobre la fisiología de la conducta; habla de los
trastornos afectivos mayores, como alteraciones del humor y los
estados de ánimo.
Expresa que el estado emocional de la mayoría de nosotros refleja lo que nos está pasando: nuestros sentimientos están ligados a los acontecimientos del mundo real, y son normalmente el resultado de valoraciones razonables de la importancia que esos acontecimientos tienen para nuestras vidas.
Entonces tenemos la ley del control y es algo básico en cuanto la persona siente que tiene el control de su propia vida (control interno), se siente bien consigo mismo y esto le da seguridad, tranquilidad, felicidad con lo cual tomará mejores decisiones. Al contrario, si siente que no tiene el control o que lo controlan, sea a nivel personal, laboral o en sus relaciones (control externo), hace que se sienta descontento y negativo.
El control comienza con sus pensamientos, todo aquello que piensa, sus valores, sus creencias, su evaluación, su perspectiva de lo que le ocurre se procesa y produce sentimientos, los cuales le pueden hacer feliz o infeliz, sentir que es capaz o no de realizar algo, puede sentir miedo o desconfianza, alegría y actitud positiva; actuando según sus pensamientos y sintiendo que lleva las riendas de su destino, o que va descontrolado por la vida sin tener el control.
Al tener el control de nuestros pensamientos y acciones, mejoramos nuestra eficacia al comportarnos de forma más eficaz y productiva en la consecución de nuestros objetivos. Si controlamos nuestros pensamientos y comportamientos, gestionamos el tiempo, organizamos y planificamos las etapas hacia la meta específica, analizamos las estrategias y evaluamos los resultados, tendremos mejores resultados.
Si en cambio mantenemos pensamientos sobre creencias limitantes, sentiremos miedo e inseguridad, sentiremos que no somos capaces de hacer alguna cosa.
También es importante el tema de las expectativas, las expectativas incumplidas crean un conflicto entre la creencia de una persona, sobre la manera que las cosas deben ser, y las condiciones ambientales reales que no emparejan esa creencia.
Este conflicto interno se expresa a través de nuestras emociones repercutiendo en nuestro cuerpo y en nuestro comportamiento.
Si es de su interés puede continuar leyendo sobre conducta, creencias y autoestima
Los trastornos afectivos
se caracterizan por emociones principalmente extremas y no realistas
como en la depresión o la ansiedad..
Puede iniciar el artículo en el siguiente link Autoeficacia y comportamiento I
Y seguir leyendo sobre la repercusión de las emociones en la salud...
Hasta la próxima lectura.
0 comentarios :
Publicar un comentario
Gracias por tu comentario, sugerencia o información y no te olvides de compartir.