Incluso aquellos para quienes cualquier clase de terapia es un ejercicio fútil, pueden mirar adelante, a la desaparición final de la tormenta.
Si resisten a la tormenta, su furia casi siempre disminuye y luego desaparece.
Misteriosa en su llegada, misteriosa en su partida, la aflicción sigue su curso y uno encuentra la paz.
William Styron.
DA PASO A TUS SUEÑOS Y AGÁRRATE FUERTE |